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El dark data es uno de los mayores retos para las empresas en la era digital. Los datos no estructurados o no utilizados, si no se gestionan de forma adecuada, pueden significar un riesgo para la ciberseguridad.
En Latinoamérica, para garantizar el cumplimiento normativo, las empresas necesitan estar alertas a los riesgos que el dark data supone. Aquí, exploramos cómo el dark data impacta la ciberseguridad y qué medidas pueden tomar las organizaciones para mitigar estos riesgos.
Los riesgos ocultos del Dark Data y su impacto en la ciberseguridad
El dark data refiere a la gran cantidad de información que las empresas acumulan a lo largo del tiempo y que no usan. Estos datos, a menudo, no están estructurados o se almacenan sin ser aprovechados. Por ejemplo, incluye:
- archivos de correo electrónico antiguos,
- registros de clientes,
- chats de atención al cliente y más.
Aunque muchas empresas no los consideran relevantes, el dark data puede contener información sensible. Esto deriva en que, si no se gestiona de forma adecuada, puede representar un gran riesgo para la ciberseguridad.
En Latinoamérica, el riesgo es aún mayor debido a los desafíos específicos de la región. La realidad de las empresas muchas veces contempla la falta de recursos tecnológicos avanzados y la ausencia de conciencia sobre la gestión de contenido empresarial.
Muchas organizaciones no tienen procedimientos claros para clasificar y proteger el dark data, lo que abre la puerta a brechas en la seguridad de la información. En caso de ciberataques, los hackers pueden acceder a estos datos no gestionados, lo que expone a las empresas a pérdidas económicas y daño en su reputación.
Cumplimiento normativo y Dark Data: desafíos para Latinoamérica
El cumplimiento normativo relacionado con la gestión de datos es un aspecto crítico en la región. En países de Latam, la regulación de datos está en constante evolución. Sin embargo, muchas empresas aún no cuentan con los recursos adecuados para cumplir con estos requisitos, lo que agrava el riesgo que supone el dark data.
Uno de los principales desafíos es que gran parte de los datos oscuros se almacena sin un propósito claro, lo que puede llevar a infracciones normativas. La gestión inadecuada de estos datos puede traducirse en multas y sanciones, además de un riesgo latente para la reputación de las empresas.
Para superar estos retos, es clave automatizar la gestión de datos e implementar tecnologías avanzadas.
3 acciones clave para gestionar el Dark Data y reducir los riesgos de seguridad
Gestionar el dark data no solo mitiga riesgos de seguridad, sino que también ayuda a cumplir con las normativas de privacidad y mejora la eficiencia operativa. Aquí presentamos tres acciones esenciales para enfrentar este reto:
1.Realizar auditorías periódicas de los datos
Las empresas deben realizar auditorías regulares para identificar qué datos tienen almacenados, dónde están y si sirven o representan un riesgo.
Sin embargo, hacer esta tarea de forma manual representa una gran cantidad de recursos consumidos y, aun así, puede haber errores u omisiones. Para resolverlo, es fundamental contar con la gestión automática del Ciclo de Vida (ILM), una funcionalidad que ofrece Coldview ECM. Gracias a ella, puedes gestionar y retener cada activo de información acorde a las políticas internas y regulaciones vigentes.
2. Implementar soluciones tecnológicas para la gestión de la información
La implementación de soluciones tecnológicas como los sistemas de gestión de contenido empresarial (ECM) es crucial para el control del dark data.
Mediante las herramientas ETL es posible extraer, transformar y cargar información desde múltiples fuentes de datos. De esta forma, al combinarla logras una gestión centralizada.
Además, al clasificar, catalogar e indexar el contenido en tiempo real, con base en reglas por origen y contenido, se optimiza la gestión.
3. Adoptar políticas de retención y eliminación de datos
La creación de políticas claras para la retención y eliminación de datos es crucial. Estas políticas deben basarse en reglas de negocio y en las normativas vigentes. Así, puedes garantizar que los datos innecesarios sean eliminados de forma segura.
Coldview integra estas prácticas en sus soluciones y ayuda a las empresas a cumplir con los requisitos regulatorios y a mantener su información segura.
Conclusión
El dark data es una realidad inevitable para las organizaciones modernas que debe ser atendida para que no represente una amenaza.
En Latinoamérica, donde las regulaciones sobre la protección de datos están en pleno desarrollo, es clave gestionar el dark data. De esta forma, es posible proteger la seguridad de la información y garantizar el cumplimiento normativo.
Adoptar soluciones tecnológicas, automatizar las auditorías y establecer políticas claras de retención y eliminación son acciones clave para reducir los riesgos asociados.
Desde Coldview te ofrecemos un enfoque integral para la gestión de datos, asegurando que tu empresa puedan mitigar los riesgos y optimizar sus operaciones en el proceso. Podemos ayudarte, ponte en contacto.